martes, 18 de noviembre de 2014

1 añito

Hoy hace 365 días que nació la cosita mas guapa que conozco.

Tiempo antes de que naciese, prácticamente nueve meses antes, recuerdo que su mami aprovechó un momento en el que yo estaba llorando (no recuerdo por qué), me cogió y me llevó a parte de todo el mundo. Y fue cuando me dijo que creía que estaba embarazada, pero que de momento no podía decírselo a nadie. Aguanté muy bien el tipo y aunque en casa me preguntaban que qué era lo que me habían dicho ese día yo no soltaba prenda.
Cuando ya se descubrió el pastel, empecé a darle vueltas a la cabeza y se me ocurrió que por qué no podría ser su madrina, y después de darle vueltas durante un par de días les dije a sus papis "¿Me podéis meter en el saco cuando elijáis madrina para el bebé?", a lo que me contestaron "Ya habíamos pensado en ti para ser la madrina". Automáticamente hubo un "clic" en mi cabeza y partir de ahí fue como si fuese a nacer una hermanita mía, alguien a quién tenía y quería cuidar siempre siempre siempre. 
Cuando pasaba por momentos malos antes de que naciese la pequeña, tengo que reconocer que pensaba "Clara aguanta que tienes que conocer a la peque y cuidar de ella todo lo que puedas" y eso me daba fuerza y ganas de luchar. Por encima de todo quería ver esa carita.

Pues hoy hace un año que por fin nació. Recuerdo que era martes y que llovía. Estuve esperando esa mañana y parte de la tarde en el hospital a que naciese... pero como la cosa iba para largo me tuve que ir a casa sin poder conocerla. Estaba nerviosa pero por lo menos pude entrar a ver a la mami antes de que diese a luz y tranquilizarme al verla sonriente y tranquila (dentro de lo que cabe).
Al día siguiente ya fui al hospital a verla. Cuando la cogí en brazos no nos movíamos ninguna de las dos... yo porque estaba tensa como un palo por si acaso se me caía o algo (menuda bobada, pienso ahora), y ella la pobre estaba envuelta en 1000 mantas así que aunque intentase moverse lo tenía muy complicado.

Y a partir de ese día empecé a ser Madrina. Pasar por tiendas donde venden ropa de bebés o juguetes y no comprar nada se convirtió en misión imposible. Todo lo que veía me gustaba para ella.

A día de hoy me tiene totalmente enamorada. Solo tengo que dar las gracias a sus papis por hacerme el mejor regalo del mundo, aunque no se explicarlo aquí. Para que me entendáis, cuando estoy con ella soy un 100% feliz. Me olvido de la tos, de la fatiga y de San Pitopato.
FELICIDADES CELIA
LALA TE QUIERE