Cuando
crees que todo te supera, que todo se vuelve cada vez más difícil a
tu alrededor, no te queda más remedio que seguir ciertos consejos de ciertos consejeros.
Ahora
es el momento de cerrar los ojos e imaginarme a mi y a los míos.
Todos juntos, tanto mi familia como mis amigos. Me gustaría poder disfrutar
de todos al mismo tiempo. No importa dónde sea, cosa lógica si
tenemos en cuenta que lo que a mi en realidad me importa es la
compañía. Aunque puestos a imaginar, si estamos en una playita en el
Caribe... pues oye, no le iba a hacer ascos.
Cada
vez va a ser más importante este momento del día en el que me
tocará cerrar los ojos e imaginarme con mi gente. Aunque quizás
algún día tenga que imaginarme a mi sola en cualquier sitio y sin querer saber nada de nadie.
Es
hora de construir un mundo en el que poder estar entre algodones. Porque tanto pincho acaba haciendo herida.